El Feminismo dio a la mujer el derecho de hacer la relación de los hombres de valía con ella aún peor que en la sociedad patriarcal, aún más peligrosa, aún más loca y con aún menos que ofrecer a cambio de aún más requisitos. No estoy diciendo que TODAS las mujeres son sinvergüenzas tóxicas que hacen denuncias de delitos sexuales falsos, extorsionan ex parejas a través de la pensión alimenticia, etc. Es peor: cuando una mujer no hace ese tipo de cosas, no es debido a lo derecho del hombre de valía que ser respetado, de recibir de ella el tratamiento que ella misma le gustaría recibir de los demás, sino por lo derecho que el Feminismo da a ella misma de tratarlos como que quiere y cómo que le interesa. Esto es peor que el desprecio puro y declarado, es tener en cuenta los hombres de valía como subclase, tratar respecto a ellos como una concesión sobre una base temporal y más allá posar como superior a causa de eso. Una broma estúpida de un tercero, y el hasta ahora objeto de "simpatía" puede recibir de ella un sermón y un tratamiento frío en el lugar de lo ya poco que recibía sin saber por qué. Pero esta simpatía termina SIEMPRE en algo relacionado con la heterosexualidad del hombre. No sólo las lesbofeministas son así. Todas las mujeres "no-feministas" también son así. Incluso la mayoría de las mujeres anti-feministas son así. Toda mujer que no defiende la liberalidad heterosexual femenina, no considera esta liberalidad compatible con la dignidad de la mujer y no muestra gratitud por lo que recibe de los hombres de valía debe ser tratada como una lesbiana y feminista para efectos prácticos.
Abigail Pereira Aranha 
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